El nuevo edificio corporativo de Bayer de México es un proyecto seleccionado a partir de un concurso de diseño. Plantea una solución que respeta e integra los dos cuerpos, uno de los cuales data de 1944 edificio histórico para la compañía.

La propuesta de diseño plantea una solución formal que integra elementos y materiales reconocibles del conjunto y proporciona al mismo tiempo una actualización de la imagen del conjunto.
Para un mejor control solar y energético la propuesta incluye una malla de acero inoxidable y un doble acristalamiento. Sus 6 sótanos estructuralmente dimensionados para la máxima eficiencia de los recursos materiales en los niveles superiores exhiben a nivel de calle una planta acceso que funciona como transición entre el programa del edificio que en su esquina curva guarda los espacios de mayor jerarquía en cada nivel de oficinas.